(Véase también Generalidades sobre las infecciones por Bartonella Generalidades sobre las infecciones por Bartonella Las Bartonella spp son bacterias gramnegativas que en el pasado se clasificaban dentro de la familia Rickettsiae. Son organismos intracelulares facultativos que normalmente viven dentro... obtenga más información ).
La fiebre de Oroya y la verruga peruana solo son endémicas en las zonas andinas de Colombia, Ecuador y Perú, y se transmiten de una persona a otra a través de mosquitos del género Phlebotomus.
Fiebre de Oroya
Los síntomas de la fiebre de Oroya incluyen fiebre y anemia grave, que puede aparecer de forma repentina o gradual. La anemia es principalmente hemolítica, pero también se produce mielosupresión. Pueden presentarse dolores musculares y articulares, cefalea intensa y, en ocasiones, delirio y coma. Es posible una bacteriemia por una sobreinfección con Salmonella u otro microorganismo coliforme. La tasa de mortalidad puede exceder el 50% en pacientes sin tratamiento.
El diagnóstico de la fiebre de Oroya se confirma con hemocultivos.
Debido a que la fiebre de Oroya a menudo se complica con bacteriemia por Salmonella, el tratamiento de elección es ciprofloxacina con ceftriaxona durante 14 días. El cloranfenicol combinado con un antibiótico beta-lactámico (p. ej., amoxicilina/clavulanato) es una alternativa en caso de resistencia a la ciprofloxacina. La azitromicina también se ha utilizado con éxito.
Verruga peruana
La verruga peruana se manifiesta en forma de múltiples lesiones cutáneas que se asemejan mucho a la angiomatosis bacilar Angiomatosis bacilar La angiomatosis bacilar es una infección cutánea causada por bacterias gramnegativas Bartonella henselae o B. quintana. El diagnóstico se basa en la histopatología de las lesiones... obtenga más información ; estos nódulos cutáneos sobreelevados, de color rojo purpúreo, generalmente aparecen en los miembros y en la cara. Las lesiones pueden persistir por meses a años, y acompañarse por dolor y fiebre.
La verruga peruana se diagnostica por su apariencia, y a veces mediante la biopsia que muestra angiogénesis dérmica.
El tratamiento con la mayoría de los antibióticos produce remisión, pero son comunes las recidivas y es necesario que la terapia sea prolongada.
El tratamiento típico de la verruga peruana consiste en rifampicina 10 mg/kg por vía oral 1 vez al día durante 10 a 14 días, o estreptomicina 15 a 20 mg/kg por vía IM durante 10 días. Se ha usado también con éxito ciprofloxacina en 2 dosis diarias de 500 mg orales durante 7 a 10 días, al igual que azitromicina, doxiciclina y trimetoprima/sulfametoxazol.