Comentario: El estudio muestra que las estatinas no eran la causa del dolor muscular en personas que previamente informaron síntomas musculares graves cuando tomaban estatinas
Comentario02/06/21 Vishnu Priya Pulipati, MD, The University of Chicago Medicine; Michael H. Davidson, MD, FACC, FNLA, The University of Chicago Medicine

Las estatinas son un grupo de fármacos que son muy eficaces para reducir el colesterol LDL (colesterol “malo”), que es un factor de riesgo importante para el endurecimiento de las arterias (ateroesclerosis). La ateroesclerosis es una de las principales causas de infartos de miocardio y accidentes cerebrovasculares, y las estatinas son muy buenas para reducir el riesgo de estos trastornos. Sin embargo, las estatinas pueden causar, muy infrecuentemente, trastornos musculares graves como rabdomiólisis y miopatía. Estos trastornos pueden causar dolor muscular, por lo que los médicos y las personas a menudo se preocupan cuando las personas que toman una estatina desarrollan dolores musculares. La preocupación era que estos dolores musculares pudieran ser un efecto adverso de la estatina y una advertencia de que se estaba iniciando una afección muscular peligrosa. Esta preocupación a menudo llevaba a las personas a dejar de tomar estatinas (o a no querer empezar a tomarlas) y, por tanto, aumentaba su riesgo de infarto de miocardio y accidente cerebrovascular. Debido a que las estatinas son tan útiles, los médicos han estado intentando estudiar si las estatinas son la verdadera causa de los dolores musculares.

El BMJ (anteriormente, The British Medical Journal) informó recientemente los resultados de un ensayo clínico multicéntrico, aleatorizado y controlado con placebo en un grupo de personas que ya habían interrumpido (o estaban pensando en interrumpir) el uso de una estatina debido a dolores musculares. Los investigadores hicieron que las personas tomaran una estatina o un placebo durante 2 meses y luego cambiaran entre los dos durante varios períodos adicionales de 2 meses. Las personas registraron si tenían síntomas musculares sin saber si estaban tomando estatina o placebo. Este enfoque permitió a los investigadores ver si los dolores musculares eran más probables mientras las personas estaban tomando las estatinas que cuando no las tomaban.

Cuando se analizaron los resultados, los investigadores hallaron que entre el 7 % y el 9 % de las personas tenía dolores musculares, ya sea que estuvieran tomando la estatina o el placebo. Interpretaron que este hallazgo significa que los dolores musculares no son infrecuentes en las personas en general y que no son necesariamente un signo de un efecto adverso del fármaco. Por lo tanto, pudieron reiniciar el tratamiento a largo plazo con estatinas en aproximadamente dos tercios de las personas del estudio.

Es importante señalar que los médicos igual no pueden desestimar los síntomas musculares informados por las personas que toman estatinas. Los médicos igual necesitan realizar una evaluación exhaustiva para identificar posibles causas de los síntomas musculares, incluidas las complicaciones farmacológicas infrecuentes de rabdomiólisis y miopatía, así como otros trastornos no relacionados con el fármaco. Pero los hallazgos de este estudio podrían ayudar a los médicos a tranquilizar a las personas con síntomas musculares leves e inespecíficos y confirmar que no tienen que interrumpir la estatina.