En un 4 a un 7% de las mujeres, la glándula tiroidea no funciona normalmente durante los primeros 6 meses después del parto. Por lo general, los niveles de la hormona tiroidea pueden ser temporalmente altos o bajos.
Las mujeres con un historial clínico de antecedentes familiares de trastornos de tiroides o diabetes tienen mayor propensión a padecerlos. Si ya han experimentado un trastorno de tiroides, como el bocio o la tiroiditis de Hashimoto, tienen mayor probabilidad de que el trastorno empeore.
El tratamiento puede ser necesario para los niveles altos de tiroides (hipertiroidismo) o los niveles bajos de tiroides (hipotiroidismo).