El concepto de muerte cerebral se creó porque los respiradores y los fármacos pueden perpetuar las funciones cardiopulmonares y otras funciones corporales a pesar del cese completo de toda actividad cerebral. Por lo tanto, el concepto de muerte cerebral (es decir, el cese total de la función cerebral integrada, sobre todo la del tronco encefálico) ha recibido una aceptación legal y cultural en la mayor parte del mundo.
Diagnóstico de muerte encefálica
Determinación seriada de criterios clínicos
Prueba de apnea
A veces, electroencefalografía (EEG), imágenes vasculares del encéfalo o ambas
Para que un médico declare la muerte cerebral, debe existir una causa estructural o metabólica conocida de daño encefálico y debe excluirse el uso de fármacos potencialmente anestésicos o paralizantes, sobre todo los administrados por el propio paciente.
Si hay hipotermia, una temperatura central < 35° C debe ser incrementada lentamente hasta > 36° C y, cuando se sospecha un estado de mal epiléptico, debe realizarse un EEG (electroencefalografía). En los adultos, después de que se han excluido todas las afecciones médicas complicadas y se ha realizado un examen neurológico exhaustivo con las pruebas necesarias, se puede confirmar la muerte cerebral. Algunos estados recomiendan a los médicos hacer dos exámenes separados por al menos 48 horas en los niños; este enfoque no es recomendado ni requerido en todos los casos de pacientes adultos (véase tabla Guías para determinar la muerte cerebral [en pacientes > 1 año Guías para determinar la muerte cerebral (en pacientes > 1 año*)† ].)
El examen incluye
Evaluación de la reactividad pupilar
Evaluación de los reflejos craneales oculovestibular, oculocefálico y corneales
Prueba de apnea
A veces se utiliza un EEG o pruebas de perfusión cerebral para confirmar la ausencia de actividad cerebral o de flujo sanguíneo encefálico y aportar nuevos datos a los miembros de la familia, pero no suele ser necesario. Están indicados cuando la prueba de apnea no es tolerada hemodinámicamente y cuando solo es conveniente un examen neurológico (p. ej., para agilizar la obtención de órganos para trasplante).
Pronóstico de la muerte encefálica
El diagnóstico de muerte cerebral es equivalente a la muerte de la persona. Ningún tratamiento adicional puede prevenir la muerte.
Una vez confirmado el diagnóstico, se interrumpen todos los tratamientos cardíacos y respiratorios de apoyo. La interrupción del apoyo ventilatorio conduce a arritmias terminales. Durante la apnea terminal, puede haber reflejos motores medulares; entre ellos, el arqueamiento de la espalda, el giro del cuello, la rigidez de las piernas y la flexión de los miembros superiores (el denominado signo de Lázaro). Hay que advertir de tales movimientos reflejos a los familiares que deseen estar presentes en el momento de desconectar el respirador.