La epifisitis del calcáneo es una rotura dolorosa entre la apófisis del calcáneo y el cuerpo del talón que se produce antes de la osificación completa del calcáneo. El diagnóstico es clínico. Se trata con almohadillas del talón y férula o yeso.
(Véase también Generalidades sobre las enfermedades del pie y el tobillo).
El calcáneo se desarrolla a partir de 2 centros de osificación: uno comienza al nacer, y el otro después de los 8 años. La osificación suele completarse a los 15 años. La rotura cartilaginosa en la epifisitis del calcáneo puede deberse a una tracción excesiva sobre la apófisis debido a una retracción o acortamiento de los músculos de la pantorrilla. Puede estar relacionado con brotes de crecimiento óseo sin alargamiento adaptativo de los músculos de la pantorrilla.
El dolor aparece en pacientes (entre 9 y 14 años) con antecedentes de actividad atlética, en especial los que usan calzado sin elevación del talón (como botines); afecta los lados o márgenes del talón y se agrava al pararse sobre las puntas de los pies o al correr. En ocasiones, puede haber calor e hinchazón.
El diagnóstico de la epifisitis del calcáneo es clínico. Las radiografías no suelen ser útiles.
Tratamiento
Almohadillas del talón y férula o yeso
Las almohadillas que elevan el talón alivian los síntomas al reducir la tracción del tendón calcáneo sobre el talón. Pueden utilizarse férulas nocturnas para estirar en forma pasiva los músculos de la pantorrilla, y ayudar a mantener la flexibilidad. El descanso, el hielo, las modificación de actividades, y el uso de almohadillas para el talón suelen aliviar el dolor. En casos más graves o resistentes al tratamiento, puede hacerse inmovilización con escayola o yeso para aliviar el dolor y estirar los músculos de la pantorrilla. Es importante reasegurar al paciente, pues los síntomas pueden durar varios meses pero son autolimitados.