Cuerpos extraños nasales

Los cuerpos extraños nasales se encuentran ocasionalmente en niños pequeños, en personas con deterioro intelectual y en pacientes psiquiátricos. Los objetos que con mayor frecuencia son introducidos en la nariz son algodón, papel, guijarros, perlas, judías, semillas, avellanas, insectos, imanes y pilas de botón (que pueden causar quemaduras químicas). Cuando sobre un cuerpo extraño retenido por un período prolongado se depositan sales minerales, el objeto se endurece y se denomina rinolito.

Se sospecha un cuerpo extraño nasal en todo paciente con rinorrea unilateral, purulenta, sanguinolenta y maloliente. El diagnóstico suele hacerse a través del relato de otra persona que haya visto cuando el objeto era introducido en la nariz o a través de la visualización con un espéculo nasal.

Los cuerpos extraños nasales deben extraerse de manera rápida y cuidadosa para prevenir complicaciones como infección, perforación nasal y epistaxis. Esto es particularmente crítico para las pilas de botón, que requieren extracción urgente. A veces, los cuerpos extraños nasales pueden eliminarse en el consultorio con un espéculo nasal y la pinza nasal de Hartmann (véase Cómo hacer procedimientos en la nariz). Las curetas de asa de alambre o tipo gancho, los catéteres de succión o los catéteres con balón también se han usado con éxito (1). El tratamiento previo con anestésicos tópicos y vasoconstrictores (lidocaína/adrenalina) puede ayudar a la visualización y la eliminación. Para evitar que un objeto resbaladizo y redondo se introduzca más en profundidad, es mejor acceder a éste por detrás con la punta doblada de una sonda roma y traccionarlo hacia adelante. A veces es necesaria la anestesia general si se forma un rinolito o si el cuerpo extraño puede ser desplazado en sentido dorsal y luego aspirado, lo que podría dar por resultado una obstrucción de la vía aérea.

Después de la extracción, la cavidad nasal debe inspeccionarse para detectar cualquier material extraño residual. La irrigación salina puede ayudar a limpiar cualquier detrito y reducir el riesgo de infección. Por lo general, no se indican antibióticos después de la extracción de un cuerpo extraño.