El quiste de Baker aparece por la acumulación de líquido sinovial atrapado, que sobresale de la cápsula articular localizada detrás de la rodilla como un saco protuberante. Entre las causas de la acumulación de líquido sinovial se incluyen la artritis reumatoide, la artrosis y el sobreesfuerzo de las rodillas. Los quistes de Baker a menudo producen molestias en la parte posterior de la rodilla. Pueden aumentar de tamaño hasta alcanzar el de una pelota de béisbol, y extenderse hacia abajo a los músculos de la pantorrilla. (Véase también
Un rápido aumento de la cantidad y de la presión del líquido acumulado en el quiste pueden provocar su ruptura. El líquido liberado del quiste causa inflamación de los tejidos inmediatos y da lugar a síntomas parecidos a los que produciría un coágulo sanguíneo en la pantorrilla (trombosis venosa profunda). Además, aunque solo en contadas ocasiones, el abombamiento o la rotura de un quiste de Baker pueden de hecho causar tromboflebitis en la vena poplítea (localizada detrás de la rodilla) al comprimir dicha vena.
Diagnóstico
El médico suele establecer el diagnóstico de quiste de Baker mediante la formulación de preguntas específicas sobre los síntomas y la detección de hinchazón detrás de la rodilla o en la pantorrilla.
Si necesario, la ecografía, la resonancia magnética nuclear (RMN) o la artrografía ayudan a establecer el diagnóstico, a distinguir el quiste de un coágulo sanguíneo en las venas profundas (TVP) y a determinar la extensión del quiste.
Tratamiento
Cuando la artritis causa hinchazón crónica de la rodilla, el médico extrae líquido articular con una aguja (un procedimiento denominado artrocentesis) e inyecta un corticoesteroide de acción prolongada (como acetónido de triamcinolona) para reducir el tamaño del quiste o prevenir la formación de un quiste de Baker. La extirpación quirúrgica del quiste es una alternativa cuando otros tratamientos no han dado resultado.
Si el quiste se ha roto, el dolor se trata con un fármaco antiinflamatorio no esteroideo (AINE) u otro analgésico si no se pueden tomar AINE. Si la rotura causa una tromboflebitis en la vena poplítea, el tratamiento consta de reposo en cama, elevación de la pierna, compresas calientes y anticoagulantes (como la warfarina).