La recuperación de una lesión de la médula espinal dependerá de la localización (nivel) y del grado de la lesión. Cuanto más alto sea el nivel de la lesión, mayor será el deterioro físico y la necesidad de rehabilitación. Una lesión a nivel del tórax o por debajo de dicha zona provoca debilidad o parálisis de las piernas (paraplejía). Una lesión a nivel del cuello provoca debilidad o parálisis de las 4 extremidades (tetraplejía). Si el nivel de la lesión en el cuello es muy alto, es posible que se paralicen los músculos que controlan la respiración y puede ser necesario un respirador. Además, la sensibilidad también queda afectada por debajo del nivel de la lesión y suele perderse el control de la vejiga y del intestino.
Los dos aspectos de mayor importancia en el cuidado o la atención de las personas con tetraplejía o paraplejía son los siguientes:
Prevención de las úlceras de decúbito: para prevenir las úlceras de decúbito, el afectado debe moverse o debe ser girado con frecuencia, para lo cual se utiliza una cama adaptada o ropa de cama especial. Cuando la persona afectada permanece sentada en la silla de ruedas, se utiliza un cojín especial que contiene agua, aire o gel para reducir la presión en las zonas donde puede producirse la ulceración.
Mantener la movilidad de las articulaciones (grado de movilidad): para mantener la movilidad y evitar la espasticidad, el afectado debe mover con frecuencia las articulaciones tanto como lo permita su grado de movilidad, ya sea por sí mismo o con ayuda de su cuidador. También son útiles la aplicación de calor, los masajes y determinados medicamentos.
También se tomarán medidas para evitar que los músculos se acorten (contracturas).
Las personas parapléjicas pueden vivir con autonomía. Los ejercicios de movilidad y de fortalecimiento de brazos y manos les permiten usar una silla de ruedas y también desplazarse de la cama a la silla de ruedas y desde esta al baño o al asiento de un automóvil. Pueden llevar a cabo muchas actividades cotidianas de forma autónoma y muchos de ellos vuelven a su trabajo. Algunas personas parapléjicas pueden conducir un automóvil con la ayuda de dispositivos adaptados.
Las sillas de ruedas motorizadas permiten a las personas tetrapléjicas desplazarse con autonomía, pero se les debe colocar en la silla de ruedas manualmente o por medios mecánicos. Algunas personas tetrapléjicas pueden mover ligeramente las manos o los dedos y, por lo tanto, controlar la silla de ruedas motorizada con un conmutador manual. Si tienen las manos y los brazos completamente paralizados, utilizan un dispositivo especial que les permite controlar la silla de ruedas motorizada con movimientos de la barbilla o incluso con el aliento. No obstante, este método requiere mucho entrenamiento. La mayoría de las personas tetrapléjicas necesitan asistencia las 24 horas.
Más información
El siguiente recurso en inglés puede ser útil. Tenga en cuenta que el MANUAL no se hace responsable del contenido de este recurso.
The National Spinal Cord Injury Association (NSCIA) (Asociación Nacional para las Lesiones Medulares; NSCIA por sus siglas en inglés): proporciona una guía de productos y servicios con información sobre proveedores y organizaciones que se especializan en herramientas utilizadas para ayudar a las personas con una lesión o una enfermedad de la médula espinal