La escleritis es una inflamación grave y destructiva que puede afectar la visión y compromete la episclera profunda y la esclerótica. Los síntomas consisten en dolor moderado a intenso, hiperemia ocular, lagrimeo y fotofobia. El diagnóstico es clínico. El tratamiento es con corticosteroides sistémicos y a veces otros inmunosupresores.
La escleritis es más frecuente en mujeres de entre 30 y 50 años (1); muchas también padecen una enfermedad reumática sistémica, como artritis reumatoide, lupus eritematoso sistémico, poliarteritis nudosa, granulomatosis con poliangeítis o policondritis recidivante.
Algunos casos son de origen infeccioso. Alrededor del 50% de los casos de escleritis no tienen ninguna causa conocida.
La escleritis puede afectar los segmentos anterior y posterior de la esclerótica, pero con mayor frecuencia involucra el segmento anterior. Se puede dividir aún más y se presenta en 3 subtipos: difuso, nodular y necrotizante.
Referencia general
1. Galor A, Thorne JE. Scleritis and peripheral ulcerative keratitis. Rheum Dis Clin North Am. 2007;33(4):835-vii. doi:10.1016/j.rdc.2007.08.002
Signos y síntomas de la escleritis
La escleritis causa dolor, a menudo caracterizado como un dolor sordo y persistente, que es lo bastante grave para afectar el sueño y el apetito. Puede haber fotofobia y lagrimeo. Aparecen parches hiperémicos profundos por debajo de la conjuntiva bulbar, de color más violáceo que en la episcleritis o la conjuntivitis. La conjuntiva palpebral es normal.
El área afectada puede ser focal (habitualmente, un cuadrante del globo) o extenderse por todo el ojo (escleritis difusa), y puede contener un nódulo elevado edematoso e hiperémico (escleritis nodular) o un área avascular (escleritis necrosante).
La escleritis intermedia y la escleritis posterior son menos comunes y es menos probable que causen ojo rojo, pero es más probable que causen moscas volantes, visión borrosa o disminución de la visión.
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En los casos graves de escleritis necrosante, pueden producirse perforación y pérdida del globo ocular.
Un estudio mostró que las enfermedades reumáticas sistémicas ocurren en el 8 al 25% de los pacientes con escleritis difusa o nodular y en el 86% de los pacientes con escleritis necrosante (1). La escleritis necrosante en pacientes con enfermedades reumáticas sistémicas señala una vasculitis sistémica subyacente.
Los médicos deben considerar cuidadosamente la posibilidad de infección en pacientes con escleritis necrosante, ya que la escleritis infecciosa puede manifestarse de manera similar e incluso complicar la escleritis necrosante.
Referencia de los signos y los síntomas
1. Bin Ismail MA, Lim RHF, Fang HM, et al. Ocular Autoimmune Systemic Inflammatory Infectious Study (OASIS)-report 4: analysis and outcome of scleritis in an East Asian population. J Ophthalmic Inflamm Infect. 2017;7(1):6. doi:10.1186/s12348-017-0124-5
Diagnóstico de la escleritis
Examen con lámpara de hendidura
El diagnóstico de la escleritis se basa en la evaluación clínica y en el examen con lámpara de hendidura, que por lo general revela un tono violáceo en las escleróticas que se origina en la conjuntiva profunda.
Se requieren frotis o rara vez biopsias para confirmar la escleritis infecciosa.
La TC o la ecografía pueden ser necesarias para el diagnóstico de escleritis posterior.
Tratamiento de la escleritis
Antiinflamatorios orales no esteroideos (AINEs) para los casos leves
Corticosteroides sistémicos
En ocasiones, otros inmunosupresores
En raras ocasiones, los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos son suficientes en los casos leves de escleritis. Los corticosteroides tópicos (p. ej., acetato de prednisolona, fluorometolona) a veces se combinan con AINE, pero tienen eficacia limitada para el tratamiento de la etiología subyacente de la escleritis, aunque pueden reducir la inflamación o la congestión de la superficie ocular.
El tratamiento inicial suele consistir en un corticoesteroide sistémico (p. ej. 1 a 2 mg/kg de prednisona por vía oral una vez al día durante 7 días, que luego se reduce en 10 mg cada semana según la tolerancia o la indicación basada en el cuadro clínico) (1). Si la inflamación regresa, se puede probar un ciclo más prolongado de corticoesteroides orales o dosis de pulso de corticoesteroides intravenosos (p. ej., metilprednisolona 1000 mg IV al día durante 3 días).
Si los pacientes tienen una respuesta inadecuada a dosis bajas de corticoesteroides durante periodos prolongados o presentan escleritis necrosante y enfermedad reumática sistémica, está indicada la inmunosupresión sistémica con ciclofosfamida, metotrexato, micofenolato de mofetilo o agentes biológicos (por ejemplo, rituximab, adalimumab), a menudo tras consultar con un reumatólogo o un oftalmólogo cualificado.
Pueden estar indicados los injertos esclerales si hay amenaza de perforación (2).
Si se sospecha escleritis infecciosa, deben administrarse antibióticos tópicos y sistémicos de amplio espectro (3, 4).
Referencias del tratamiento
1. Daniel Diaz J, Sobol EK, Gritz DC. Treatment and management of scleral disorders. Surv Ophthalmol. 2016;61(6):702-717. doi:10.1016/j.survophthal.2016.06.002
2. Sainz de la Maza M, Tauber J, Foster CS. Scleral grafting for necrotizing scleritis. Ophthalmology. 1989;96(3):306-310. doi:10.1016/s0161-6420(89)32892-2
3. Yu J, Syed ZA, Rapuano CJ. Infectious Scleritis: Pathophysiology, Diagnosis, and Management. Eye Contact Lens. 2021;47(8):434-441. doi:10.1097/ICL.0000000000000813
4. Helm CJ, Holland GN, Webster RG Jr, Maloney RK, Mondino BJ. Combination intravenous ceftazidime and aminoglycosides in the treatment of pseudomonal scleritis. Ophthalmology. 1997;104(5):838-843. doi:10.1016/s0161-6420(97)30225-5
Pronóstico de la escleritis
El pronóstico de la escleritis depende de la gravedad de la enfermedad. Las complicaciones oculares tienen más probabilidades de ocurrir en pacientes con enfermedad más grave (p. ej., escleritis necrosante, escleritis posterior).
Un estudio longitudinal de 12 años mostró que en 16% de los pacientes con escleritis disminuyó la agudeza visual (1).
Referencia del pronóstico
1. Jabs DA, Mudun A, Dunn JP, Marsh MJ. Episcleritis and scleritis: clinical features and treatment results. Am J Ophthalmol. 2000;130(4):469-476. doi:10.1016/s0002-9394(00)00710-8
Conceptos clave
La escleritis es una inflamación grave y destructiva que puede afectar la visión.
Los síntomas incluyen dolor sordo y profundo; fotofobia, lagrimeo y enrojecimiento focal o difuso de los ojos.
El diagnóstico se hace clínicamente y con la lámpara de hendidura.
La mayoría de los pacientes requieren corticosteroides sistémicos y/o terapia inmunosupresora sistémica, a menudo prescritos en consulta con un reumatólogo.
Pueden estar indicados los injertos esclerales si hay amenaza de perforación.
