La causa más común de la laringitis aguda es
También puede aparecer laringitis inducida por la tos en casos de bronquitis, neumonía, influenza, pertussis, sarampión y difteria. El uso excesivo de la voz (sobre todo cuando se habla o canta en voz muy alta), las reacciones alérgicas, el reflujo gastroesofágico, la bulimia o la inhalación de sustancias irritantes (p. ej., humo de cigarrillo o ciertos fármacos en aerosol) pueden causar laringitis aguda o crónica. Las drogas pueden inducir edema laríngeo potencialmente letal, por ejemplo, como un efecto colateral de los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (ECA). La laringitis bacteriana es extremadamente rara. El humo del cigarrillo puede causar edema de Reinke en ambas cuerdas vocales.
(Véase también Generalidades sobre los trastornos de la laringe).
Signos y síntomas
El síntoma más prominente de la laringitis es generalmente
De modo característico, el volumen está muy disminuido; algunos pacientes presentan afonía. También puede haber ronquera, sensación de cosquilleo o de aspereza y una necesidad constante de aclarar la garganta. Los síntomas varían con la intensidad de la inflamación.
En las infecciones más intensas, puede haber fiebre, malestar general, disfagia y dolor de garganta. El edema laríngeo, si bien raro, puede causar estridor y disnea.
Diagnóstico
El diagnóstico de la laringitis se basa en los síntomas.
La laringoscopia flexible indirecta o directa se recomienda cuando los síntomas persisten > 3 semanas; los hallazgos en la laringitis incluyen eritema de leve a marcado de la mucosa, que puede estar edematosa. En caso de reflujo, hay tumefacción del revestimiento interno de la laringe y enrojecimiento de las aritenoides.
Si se observa una seudomembrana, se sospecha difteria.
Tratamiento
Para la laringitis viral, no se cuenta con ningún tratamiento específico.
Los antitusivos, el reposo de la voz y las inhalaciones de vapor alivian los síntomas y favorecen la resolución de la laringitis aguda. La cesación del hábito de fumar y el tratamiento de la bronquitis aguda o crónica pueden aliviar la laringitis.
Según la causa presunta, pueden resultar beneficiosos los tratamientos para controlar el reflujo gastroesofágico, la bulimia o la laringitis inducida por fármacos.