Etiología de la congestión nasal y de la rinorrea
La causa más común de poliuria (véase tabla ) en adultos y en niños es
Infección respiratoria alta Generalidades sobre las infecciones virales respiratorias Las infecciones virales suelen afectar las vías respiratorias superiores o inferiores. Aunque estas infecciones respiratorias pueden clasificarse en función del virus causante (p. ej., gripe)... obtenga más información
Reacciones alérgicas Generalidades sobre los trastornos alérgicos y atópicos Las enfermedades alérgicas (incluso las atópicas) y otros trastornos por hipersensibilidad se deben a reacciones inmunitarias exageradas o inapropiadas a antígenos extraños. Las reacciones inmunitarias... obtenga más información
El aire seco puede provocar congestión. La sinusitis aguda Sinusitis La sinusitis es la inflamación de los senos paranasales debida a infecciones virales, bacterianas o micóticas, o a reacciones alérgicas. Los síntomas consisten en obstrucción y congestión nasales... obtenga más información es algo menos común y un cuerpo extraño nasal Cuerpos extraños nasales Los cuerpos extraños nasales se encuentran ocasionalmente en niños pequeños, en personas con deterioro intelectual y en pacientes psiquiátricos. Los objetos que con mayor frecuencia son introducidos... obtenga más información es poco usual (y sucede sobre todo en niños).
Los pacientes que utilizan descongestivos tópicos durante > 3 a 5 días a menudo experimentan importante congestión de rebote cuando los efectos del descongestivo desaparecen, lo que determina que continúen con el uso del descongestivo en un círculo vicioso de empeoramiento persistente de la congestión. Esta situación (rinitis medicamentosa) puede persistir por algún tiempo y ser interpretada de manera errónea como una continuación del problema original en lugar de una consecuencia del tratamiento.
Evaluación de la congestión nasal y la rinorrea
Anamnesis
La anamnesis de la enfermedad actual debe determinar las características de la secreción (p. ej., acuosa, mucoide, purulenta, sanguinolenta) y si es crónica o recurrente. En este último caso, debe establecerse toda relación con el lugar donde vive el paciente, la estación del año y la exposición a posibles alérgenos desencadenantes, que son numerosos. Una secreción unilateral, clara y acuosa, en particular después de un traumatismo craneoencefálico, puede indicar una pérdida de líquido cefalorraquídeo (LCR). La secreción de LCR también puede ocurrir espontáneamente en mujeres obesas en su quinta década como resultado de una hipertensión intracraneal idiopática Hipertensión intracraneal idiopática La hipertensión intracraneana idiopática produce un aumento de la presión intracraneana sin que existe una lesión expansiva o una hidrocefalia, probablemente por obstrucción del drenaje venoso... obtenga más información .
Revisión por aparatos y sistemas: debe buscar los síntomas de las posibles causas, como fiebre y dolor facial (sinusitis), ojos llorosos y pruriginosos (alergias) y dolor de garganta, malestar general, fiebre y tos (infección viral de las vías respiratorias superiores).
Antecedentes personales: deben evaluar alergias conocidas y existencia de diabetes o inmunodepresión. Los antecedentes de consumo de medicamentos (de prescripción, de venta libre, ilícitos) deben incluir preguntas específicas sobre el uso de descongestivos tópicos.
Examen físico
Evaluar los signos vitales en busca de fiebre.
La exploración se centra en la nariz y el área sobre los senos. Se inspecciona la cara a fin de determinar la presencia de eritema focal sobre los senos frontal y maxilar; estas zonas también se palpan para ver si hay dolor. La mucosa nasal se inspecciona para evaluar el color (p. ej., roja o pálida), la hinchazón, el color y las características de la secreción y, en especial en los niños, la presencia de un cuerpo extraño.
Signos de alarma
Los siguientes hallazgos en pacientes con congestión nasal o rinorrea deben considerarse preocupantes:
Secreción unilateral, en especial si es purulenta o sanguinolenta
Dolor facial espontáneo o a la palpación
Interpretación de los hallazgos
Los síntomas y el examen físico suelen ser suficientes para sugerir un diagnóstico (véase tabla ).
En los niños, la secreción maloliente unilateral sugiere la presencia de un cuerpo extraño nasal Cuerpos extraños nasales Los cuerpos extraños nasales se encuentran ocasionalmente en niños pequeños, en personas con deterioro intelectual y en pacientes psiquiátricos. Los objetos que con mayor frecuencia son introducidos... obtenga más información . Si éste no se observa, se sospecha de sinusitis Sinusitis La sinusitis es la inflamación de los senos paranasales debida a infecciones virales, bacterianas o micóticas, o a reacciones alérgicas. Los síntomas consisten en obstrucción y congestión nasales... obtenga más información cuando la rinorrea purulenta persiste durante > 10 días junto con fatiga y tos.
Estudios complementarios
En general, no se indican estudios complementarios para los síntomas nasales agudos, a menos que se sospeche sinusitis invasiva en un paciente con diabetes o inmunodepresión; estos pacientes suelen requerir TC.
Si se sospecha de una fístula de líquido cefalorraquídeo, se debe evaluar una muestra del líquido en busca de beta-2 transferrina, que es altamente específica para el líquido cefalorraquídeo.
Tratamiento de la congestión nasal y la rinorrea
Se tratan las enfermedades específicas. Los descongestivos tópicos u orales pueden aliviar la congestión. Como descongestivo tópico, puede utilizarse oximetazolina, 2 pulverizaciones en cada narina 1 o 2 vezes al día durante 3 días. Como descongestivo oral, se utiliza seudoefedrina, 60 mg 2 veces al día. El uso prolongado de descongestivos tópicos puede causar congestión de rebote, y el uso prolongado de descongestivos orales puede aumentar la tensión arterial y la frecuencia cardíaca. Ambos deben evitarse.
La rinorrea viral puede tratarse con antihistamínicos orales de primera generación (p. ej., difenhidramina, 25 a 50 mg por vía oral 2 veces al día), que se recomiendan por sus efectos anticolinérgicos no relacionados con sus propiedades de bloqueante H2.
La congestión y la rinorrea alérgicas pueden tratarse con antihistamínicos; en estos casos, se utilizan antihistamínicos sin efectos anticolinérgicos (p. ej., fexofenadina, 60 mg por vía oral 2 veces al día) según necesidad, porque provocan menos efectos adversos. Los corticosteroides nasales (p. ej., mometasona 2 aerosoles en cada fosa nasal por día) también ayudan a aliviar los síntomas.
Los antihistamínicos y los descongestivos no se recomiendan para niños < 6 años.
Conceptos esenciales en geriatría: tratamiento de la congestión nasal y la rinorrea
Los antihistamínicos, en particular los de primera generación como difenhidramina, pueden tener efectos sedantes y anticolinérgicos y deben administrarse en dosificaciones más bajas en los adultos mayores. De modo similar, los simpaticomiméticos deben utilizarse con la dosificación más baja que sea clínicamente eficaz.
Conceptos clave
La congestión nasal y la rinorrea son causadas, en su mayor parte, por infección de las vías respiratorias superiores o por alergias.
Considerar un cuerpo extraño en los niños.
También se debe considerar la congestión de rebote debido al uso excesivo de descongestivo tópico.