El TOC es un poco más frecuente en las mujeres que en los varones, y afecta del 1 al 2% de la población (1 Referencia general El trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) se caracteriza por pensamientos, impulsos o imágenes recurrentes, persistentes, no deseados e intrusivos (obsesiones) y/o por conductas o actos mentales... obtenga más información ). La edad media de inicio del TOC es de 19 a 20 años, pero alrededor del 25% de los casos comienza a los 14 años (véase Trastorno obsesivo compulsivo [TOC] y trastornos relacionados en niños y adolescentes Trastorno obsesivo compulsivo (TOC) y trastornos relacionados en niños y adolescentes El trastorno obsesivo-compulsivo se caracteriza por obsesiones, compulsiones o ambas. Las obsesiones son ideas, imágenes o impulsos irresistibles y persistentes de hacer algo. Las compulsiones... obtenga más información ). Hasta un 30% de las personas con TOC también tienen un trastorno de tic Trastornos de tics y síndrome de Tourette en niños y adolescentes Los tics se definen como movimientos musculares súbitos, rápidos, no rítmicos y repetidos que incluyen sonidos o vocalizaciones. El síndrome de Tourette se diagnostica cuando los pacientes tienen... obtenga más información pasado o actual.
Referencia general
1. Stein DJ, Costa DLC, Lochner C, et al: Obsessive-compulsive disorder. Nat Rev Dis Primers 5(1):52, 2019. doi: 10.1038/s41572-019-0102-3.
Signos y síntomas del trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)
Obsesiones son pensamientos, impulsos o imágenes intrusivos, no deseados cuya presencia por lo general causan angustia o ansiedad intensas. El tema dominante de los pensamientos obsesivos puede ser un daño, un riesgo hacia uno mismo o hacia otros, una contaminación, una duda, una simetría, una pérdida o una agresión. Por ejemplo, los pacientes pueden obsesionarse con contaminarse con suciedad o gérmenes al menos que se laven las manos por ≥ 2 h al día. Las obsesiones no son placenteras. Por lo tanto, los pacientes por lo general tratan de ignorar o reprimir los pensamientos, impulsos o imágenes. O intentan neutralizarlos con una compulsión.
Las compulsiones (a menudo denominadas rituales) son conductas excesivas, repetitivas, intencionales que las personas afectadas sienten que deben realizar para prevenir o reducir la ansiedad causada por sus pensamientos obsesivos o para neutralizar sus obsesiones. Algunos ejemplos son
Lavarse (p. ej., lavarse las manos, ducharse)
Asegurarse (p. ej., de que la cocina esté apagada, que las puertas estén cerradas con llave)
Contar (p. ej., repetir una conducta un cierto número de veces)
Ordenar (p. ej., ordenar la vajilla o los elementos de trabajo en un patrón específico)
La mayoría de los rituales, como lavarse las manos o comprobar las cerraduras, son observables, pero algunos rituales mentales, como contar repetidamente en silencio o recitar frases en cada respiración, no lo son. Por lo general, los rituales compulsivos deben realizarse con precisión cumpliendo reglas estrictas. Los rituales pueden o no estar asociados de manera realista con el evento temido. Cuando se asocian con la realidad (p. ej., ducharse para evitar estar sucio, controlar la cocina para evitar incendios), las compulsiones son claramente excesivas, p. ej., ducharse durante horas cada día o controlar la cocina 30 veces antes de salir de la casa. En todos los casos, las obsesiones y/o compulsiones deben insumir mucho tiempo (p. ej., 1 h/día, a menudo mucho más) o provocar en los pacientes un malestar o un deterioro significativo en su funcionamiento; en casos extremos, las obsesiones y las compulsiones pueden ser incapacitantes.
El grado de reconocimiento de la conducta varía. La mayoría de las personas con trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) reconocen al menos en cierta medida que las ideas que subyacen a sus obsesiones no son realistas (p. ej., que en realidad no tendrán cáncer si tocan un cenicero). Sin embargo, ocasionalmente, esta percepción no existe (es decir, los pacientes están convencidos de que las ideas subyacentes a sus obsesiones son verdaderas y que sus compulsiones son razonables).
Como las personas que sufren este trastorno pueden temer las situaciones embarazosas o la estigmatización, a menudo disimulan sus obsesiones y rituales. Las relaciones sociales pueden estar deterioradas y el rendimiento escolar o laboral puede disminuir. La depresión es una característica secundaria frecuente.
Muchas personas con TOC tienen trastornos psicológicos coexistentes, incluyendo
Un trastorno depresivo Trastornos depresivos Los trastornos depresivos se caracterizan por una tristeza de una intensidad o un duración suficiente como para interferir en la funcionalidad y, en ocasiones, por una disminución del interés... obtenga más información o un trastorno bipolar Trastornos bipolares Los trastornos bipolares se caracterizan por episodios de manía y depresión, que pueden alternar aunque en muchos pacientes predomina uno sobre el otro. Se desconoce la causa exacta, pero pueden... obtenga más información (63%; el más común es el trastorno depresivo mayor Depresión mayor (trastorno unipolar) Los trastornos depresivos se caracterizan por una tristeza de una intensidad o un duración suficiente como para interferir en la funcionalidad y, en ocasiones, por una disminución del interés... obtenga más información [41%])
Trastorno de personalidad obsesivo-compulsivo Trastorno obsesivo-compulsivo de la personalidad (TOC) El trastorno de personalidad obsesivo-compulsivo se caracteriza por una preocupación generalizada por el orden, el perfeccionismo y el control (sin espacio para la flexibilidad) que en última... obtenga más información (23 a 32%)
Más de una cuarta parte hasta aproximadamente dos tercios de las personas con TOC tienen pensamientos suicidas en algún momento, y del 10 al 13% intentan suicidarse (véase Comportamiento suicida Conducta suicida El suicidio es la muerte causada por un acto intencional de autolesión diseñado para ser letal. El comportamiento suicida abarca un espectro de conductas, desde el intento de suicidio y las... obtenga más información ). El riesgo de intento de suicidio aumenta si las personas también tienen un trastorno depresivo mayor.
Diagnóstico del trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)
Criterios clínicos
El diagnóstico del trastorno obsesivo-compulsivo es clínico, se basa en la presencia de obsesiones, compulsiones o ambas. Las obsesiones o compulsiones deben insumir mucho tiempo (p. ej., > 1 h/día) o causar malestar clínico intenso o deterioro en el funcionamiento.
Tratamiento del trastorno obsesivo-compulsivo (TOC)
Terapia de exposición y prevención del ritual (respuesta); a menudo se agrega terapia cognitiva
Inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina (ISRS) o clomipramina, más, si es necesario, un medicamento de refuerzo
La terapia de exposición y de prevención de los rituales suele ser eficaz en pacientes con trastorno obsesivo compulsivo; su elemento esencial es la exposición gradual de los pacientes a las situaciones o personas que desencadenan las obsesiones y los rituales que provocan ansiedad mientras se les solicita que se abstengan de sus rituales. Por ejemplo, se le puede pedir a un paciente con obsesiones de contaminación y compulsión por el lavado que toque el asiento del inodoro sin lavarse las manos. Este abordaje permite que la ansiedad provocada por la exposición disminuya mediante la habituación. La mejoría a menudo se mantiene por años, en especial en pacientes que dominan el método y lo utilizan incluso una vez que ha terminado el tratamiento formal. Sin embargo, algunos pacientes tienen respuestas incompletas (como algunos también las tienen con los fármacos).
Las técnicas de terapia cognitiva (p. ej., reestructuración cognitiva) también pueden ser útiles para atacar algunos síntomas del trastorno obsesivo-compulsivo.
Los ISRS Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) Varias clases de fármacos y medicamentos se pueden utilizar para tratar la depresión: Inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) Moduladores de la serotonina (antagonistas... obtenga más información y la clomipramina (un antidepresivo tricíclico con potentes efectos serotoninérgicos) suelen ser muy eficaces. Los pacientes suelen requerir dosis más altas de las que normalmente se necesitan para la depresión y la mayoría de los trastornos de ansiedad. Algunos pacientes que no mejoran significativamente con cursos adecuados de estos fármacos pueden beneficiarse con el agregado de medicamentos sinergistas como un neuroléptico atípico (p. ej., aripiprazol) o un modulador del glutamato (p. ej., memantina, N-acetilcisteína). Hay más datos que apoyan el uso de neurolépticos atípicos para reforzar la acción de los ISRS que para otros medicamentos.
Muchos expertos creen que lo mejor es combinar la prevención de la exposición y ritual con la farmacoterapia, en especial en los casos graves.
Conceptos clave
Las obsesiones son pensamientos, imágenes o impulsos intrusivos, no deseados que generalmente provocan malestar intenso o ansiedad.
Las compulsiones son rituales excesivos, repetitivos que las personas sienten que deben hacer para reducir la ansiedad causada por sus pensamientos obsesivos o neutralizar sus obsesiones.
Las obsesiones y/o compulsiones deben insumir mucho tiempo (p. ej., > 1 h/día, a menudo mucho más) o provocar malestar intenso o deterioro en el funcionamiento del paciente.
Se trata mediante la exposición gradual de los pacientes a las situaciones que desencadenan las obsesiones y los rituales que provocan ansiedad mientras se les pide que se abstengan de sus rituales. El agregado de enfoques cognitivos a la exposición y la prevención de la respuesta puede ser útil.
La administración de un ISRS o clomipramina, a menudo en dosis relativamente altas, suele ser eficaz.