La esquizofrenia y trastornos psicóticos relacionados (trastorno con ideas delirantes, trastorno psicótico breve, trastorno esquizofreniforme, trastorno esquizoafectivo, y trastorno de personalidad esquizotípico) se caracterizan principalmente por presentar síntomas psicóticos y a menudo síntomas negativos y deterioro cognitivo.
La palabra esquizofrenia significa "mente dividida," y fue creada basándose en la idea de que diferentes partes de la personalidad de un paciente, como el pensamiento, la emoción y la percepción, se habían fragmentado o dividido. El término psicótico implica cierto grado de pérdida de contacto con la realidad.
La esquizofrenia se caracteriza a menudo por ciertos tipos de síntomas.
Los síntomas psicóticos consisten en alucinaciones, ideas delirantes, pensamiento y lenguaje desorganizados, y comportamiento motor desorganizado o anormal (incluyendo catatonia).
Los síntomas negativos se refieren a una marcada disminución o una ausencia de pensamientos, emociones y comportamientos normales, como tener una pobreza de contenido del pensamiento (menor espontaneidad y productividad del pensamiento), afecto aplanado y falta de motivación.
La disfunción cognitiva en estos trastornos afecta principalmente la atención, la función ejecutiva y la memoria.
El diagnóstico se basa en los síntomas y el curso de la enfermedad; los marcadores biológicos de la enfermedad aún no se han identificado, pero se buscan ampliamente.

