Los macrólidos son una clase de antibióticos que se usan a menudo para tratar infecciones en personas que son alérgicas a las penicilinas.
Los macrólidos comprenden los siguientes:
Los macrólidos impiden que las bacterias produzcan las proteínas que necesitan para crecer y multiplicarse.
Fidaxomicina se administra solo por boca (vía oral) y es mínimamente absorbida en el torrente sanguíneo cuando se toma de esta forma. Se utiliza para tratar Clostridioides difficile que causa colitis inducida pero no daña excesivamente a las otras bacterias que normalmente residen en los intestinos sanos.
Los macrólidos interactúan con muchos otros fármacos (lo que se denomina interacciones entre fármacos). A menudo, la interacción aumenta los efectos (incluidos los efectos secundarios) de los otros fármacos. Cuando se administran junto con otros fármacos, los macrólidos pueden aumentar el riesgo de muerte cardíaca súbita en personas con síndrome del QT largo congénito.
Macrólidos
Fármaco |
Indicaciones frecuentes |
Algunos efectos secundarios |
Azitromicina Claritromicina Eritromicina Fidaxomicin |
Infecciones respiratorias Para la azitromicina: Infecciones por clamidias de los órganos reproductores y las vías urinarias Para fidaxomicina: utilizada solo para Clostridioides difficile |
Dolor abdominal, náuseas, vómitos y diarrea (especialmente a dosis altas) Ictericia* Ritmos cardíacos anómalos (arritmias)* |
* Estos efectos secundarios no se informan con fidaxomicina. |
(Véase también Introducción a los antibióticos.)
Uso de macrólidos durante el embarazo y la lactancia
Los macrólidos deben tomarse durante el embarazo solo cuando los beneficios del tratamiento superen los riesgos.
Con eritromicina, azitromicina y fidaxomicina no se han observado efectos nocivos en el feto en estudios realizados con animales, pero no se han realizado estudios bien diseñados en mujeres embarazadas. La eritromicina se considera uno de los antibióticos más inofensivos para usar durante el embarazo. Se considera más seguro que la azitromicina porque se ha utilizado más y, por tanto, se sabe más sobre dicho antibiótico.
Con el macrólido claritromicina, se han observado efectos nocivos sobre el feto en estudios realizados con animales. (Véase también Consumo de medicamentos u otras drogas durante el embarazo.)
El uso de eritromicina durante la lactancia se suele considerar aceptable. Se desconoce si el uso de otros macrólidos es seguro durante la lactancia materna. (Véase también Uso de medicamentos durante la lactancia.)