Complicaciones de la cirrosis

Síntoma

Posible causa

Hinchazón abdominal

Ascitis (acumulación de líquido dentro del abdomen)

Molestias abdominales, por lo general con fiebre

Peritonitis bacteriana espontánea (infección del líquido que se ha acumulado en el abdomen)

Dolor o hinchazón en las pantorrillas

Trombosis venosa profunda (coágulos sanguíneos en las venas de las piernas)

Confusión y somnolencia

Encefalopatía hepática (deterioro de la función cerebral debida a la acumulación de sustancias tóxicas en la sangre, que normalmente son eliminadas por el hígado)

Dificultad respiratoria

Síndrome hepatopulmonar (daño en los vasos sanguíneos pulmonares)

Hipertensión portopulmonar (hipertensión en las arterias pulmonares debida a la hipertensión en la vena porta, que transporta la sangre desde el intestino al hígado)

Embolia pulmonar (obstrucción de una arteria del pulmón, por lo general por un coágulo de sangre que ha viajado desde otra localización, como la pierna)

Ascitis (una acumulación de líquido en el abdomen suficiente como para limitar la función del diafragma, lo que dificulta la respiración)

Hidrotórax hepático (una acumulación de líquido en el tórax fuera de los pulmones que impide que se hinchen completamente)

Cansancio y palidez

Cáncer de hígado (también puede causar pérdida de peso)

Anemia provocada por cualquiera de las causas siguientes:

  • Hemorragia

  • Agrandamiento del bazo

  • Desnutrición con un déficit de ácido fólico, hierro o vitamina B12

  • Consumo crónico de alcohol, que puede interferir con la producción de glóbulos sanguíneos

Micción reducida y dificultad respiratoria

Síndrome hepatorrenal (insuficiencia renal debida a una insuficiencia hepática)

Fracturas, a menudo debidas a traumatismos leves, como una caída menor

Osteoporosis, causada en parte por carencia de vitamina D; caídas, causadas en parte por la pérdida de tejido muscular (sarcopenia)

Síntomas de infección

Leucopenia (disminución del número de glóbulos blancos de la sangre)

Ictericia (pigmentación amarillenta de la piel y del blanco de los ojos)

Disfunción en el procesamiento de la bilirrubina (un producto de desecho formado por la descomposición de los glóbulos rojos viejos o deteriorados)

Propensión a sufrir moretones o tendencia a sangrar con facilidad

Erupciones con pequeños puntos de color púrpura rojizo (petequias) o manchas más grandes (púrpura), que indican sangrado en la piel

Aumento de tamaño del bazo, que atrapa las plaquetas (necesarias para la coagulación de la sangre)

Abuso crónico del alcohol, que puede alterar la producción de plaquetas

Déficit de vitamina K

Reducción de la producción de factores de coagulación (proteínas que ayudan a coagular la sangre) por el hígado dañado

Picor (prurito) y pequeños depósitos de grasa amarillentos, en la piel o en los párpados (ictericia)

Deterioro del procesamiento de la bilis

Hemorragia rectal

Venas varicosas en el recto (varices rectales)

Agrandamiento del bazo (esplenomegalia)

Hipertensión portal (presión sanguínea elevada en la vena que transporta la sangre al hígado)

Heces de color claro, blandas, voluminosas, con apariencia aceitosa e inusualmente malolientes (esteatorrea)

Deterioro de la absorción de las grasas

Vómitos de sangre

Sangrado de las venas varicosas en la zona inferior del esófago (varices esofágicas) o en el estómago (varices gástricas) debidas a la hipertensión portal