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La culminación exitosa del proceso completo que va desde el feto, que se encuentra inmerso en el líquido amniótico y depende por completo de la placenta para alimentarse y respirar, hasta el bebé que sale al mundo exterior llorando y respirando aire, despierta una profunda admiración. Los recién nacidos sanos (considerados desde el alumbramiento hasta el primer mes de vida) y los lactantes (desde el mes de vida hasta el año) necesitan una serie de cuidados para asegurar su desarrollo normal y el mantenimiento de su salud.
Los padres y cuidadores pueden ayudar a sus hijos a conseguir la mejor salud posible. Los primeros años de vida son cruciales para la salud y el desarrollo físico, intellectual y social/emocional. Si las necesidades físicas de los bebés son satisfechas regular y constantemente, estos aprenden rápidamente que la persona que se ocupa de ellos es una fuente de satisfacción, lo que crea lazos firmes de confianza y de apego. Los bebés sanos se conviertan en niños y adolescentes sanos.
El cólico se refiere a un patrón específico de llanto intenso excesivo e irritabilidad que ocurre sin ninguna razón aparente (por ejemplo, hambre, enfermedad, o lesión) en recién nacidos sanos. El cólico por lo general comienza en el primer mes de vida, es peor cuando el bebé tiene cerca de 6 semanas de edad y desaparece, a menudo de repente, hacia los 3 a 4 meses de edad.
Las bacterias son organismos microscópicos unicelulares. Solo algunas bacterias producen enfermedades en las personas. Otras bacterias viven en el interior del tracto intestinal, el tracto genitourinario, o en la piel sin causar daño. Incluso algunas bacterias se cree que ayudan a mantener a la gente sana.
Los niños van adquiriendo un gran número de habilidades a medida que crecen. Algunas de estas habilidades, como, por ejemplo, controlar la orina y las deposiciones, dependen principalmente del nivel de madurez de los nervios y del cerebro del niño. Otras, como comportarse adecuadamente en casa y en la escuela, son resultado de una interacción muy compleja entre el desarrollo físico e intelectual (cognitivo) del niño, la salud, el carácter y la relación con sus padres, sus profesores y las personas que lo cuidan (véase también Desarrollo infantil). Otros comportamientos, como chuparse el dedo, aparecen cuando los niños buscan maneras de ayudarse a sobrellevar el estrés. Y aún otros comportamientos aparecen como respuesta al estilo de crianza.
Los defectos congénitos, también denominados anomalías congénitas, son alteraciones físicas de naturaleza diversa que se producen en algún momento previo al nacimiento. Por lo general suelen resultar evidentes durante el primer año de vida del bebé.
Muchos de los posibles defectos en el cerebro y la médula espinal, los denominados defectos del tubo neural, se manifiestan en las primeras semanas del embarazo. Otros defectos, como la hidrocefalia y microcefalia, se desarrollan en etapas posteriores del embarazo.
Los defectos congénitos, también denominados anomalías congénitas, son alteraciones físicas de naturaleza diversa que se producen en algún momento previo al nacimiento. "Congénito" significa "presente al nacer".
Un defecto congénito puede darse en cualquier parte del tubo digestivo (en el esófago, el estómago, el intestino delgado, el intestino grueso, el recto o el ano). Estos defectos congénitos incluyen los siguientes:
Aproximadamente uno de cada 100 bebés nace con un defecto del corazón. Algunos son graves, pero muchos no. Los defectos pueden implicar formaciones anómalas en las paredes o en las válvulas cardíacas, o en los vasos sanguíneos que entran o salen del corazón.
Los defectos congénitos son más frecuentes en los riñones y el aparato urinario (tracto urinario) que en cualquier otro sistema del cuerpo. Los defectos pueden desarrollarse en
Los huesos de los niños crecen continuamente y cambian su forma (remodelación) de forma considerable. El crecimiento se realiza a partir de una parte vulnerable del hueso denominada placa (cartílago) de crecimiento. En la remodelación, el tejido óseo antiguo es reemplazado gradualmente por tejido óseo nuevo. Muchos trastornos óseos provienen de los cambios que suceden en el aparato locomotor en crecimiento del niño. Estos trastornos pueden mejorar o empeorar con el crecimiento. Otros problemas de los huesos se deben a factores hereditarios o simplemente suceden en la infancia sin que se sepa la causa.
En Estados Unidos, la incidencia global de cáncer en niños y adolescentes ha aumentado con el tiempo. Desde 1975 hasta 2022, las tasas aumentaron aproximadamente un 0,8 por cada 100 000 cada año. Sin embargo, las tasas de mortalidad disminuyeron entre 1970 y 2019 en un 71% en los niños (de 6,3 a 1,8 por cada 100 000) y en un 61% en los adolescentes (de 7,2 a 2,8 por cada 100 000).
El maltrato infantil incluye todos los tipos de maltrato y negligencia de un menor de 18 años por parte de un progenitor, un cuidador u otra persona que ejerza una función de custodia (por ejemplo, un clérigo, un entrenador o un profesor) y que resulten en daño, daño potencial, o amenaza de daño a un niño. La negligencia infantil consiste en la incapacidad de satisfacer las necesidades físicas y emocionales básicas del niño. El maltrato infantil consiste en hacer algo que perjudica al menor.
Los riñones filtran y limpian la sangre; también mantienen el equilibrio corporal de agua, sales en disolución ( electrólitos como sodio, potasio, y calcio) y nutrientes en la sangre.
El tejido conjuntivo es el tejido resistente y a menudo fibroso que tiene la función de mantener unidas las estructuras corporales y proporciona resistencia y elasticidad. Los músculos, los huesos, el cartílago, los ligamentos y los tendones están formados principalmente por tejido conjuntivo. El Tejido conectivo se encuentra también en otras partes del cuerpo, como la piel y los órganos internos. Las características del tejido conjuntivo y de los tipos de células que este contiene varían según su localización en el organismo. El tejido conjuntivo es fuerte y, por consiguiente, capaz de soportar el peso y la tensión.
La fibrosis quística (mucoviscidosis) es una enfermedad hereditaria que causa que ciertas glándulas produzcan secreciones anormalmente espesas, lo que provoca a su vez lesiones en órganos y tejidos, especialmente en los pulmones y en el tubo digestivo.
La ambliopía, una causa frecuente de pérdida de visión en niños, es una disminución de la visión que se produce debido a que el cerebro ignora la imagen enviada por uno de los ojos. Esta pérdida de visión puede ser irreversible si no se diagnostica y se trata antes en las etapas iniciales de la infancia.
La colestasis es una disminución de la formación de bilis y del flujo biliar. Como resultado, la bilirrubina retrocede hacia el torrente sanguíneo ( hiperbilirrubinemia), dando lugar a una coloración anómala amarilla a amarillo verdosa del blanco de los ojos (esclerótica) y de la piel llamada ictericia.
El crecimiento físico se refiere a un aumento en el tamaño del cuerpo (longitud o altura y peso) y en el tamaño de los órganos. Desde el nacimiento hasta la edad de 1 o 2 años, los niños crecen con mucha rapidez. Después de este rápido crecimiento del lactante y del niño, el crecimiento se ralentiza hasta que se llega al crecimiento acelerado de los adolescentes. A medida que el crecimiento se hace más lento, los niños necesitan menos calorías y los padres observan una disminución del apetito. Hacia los 2 años de edad, muchos niños tienen unos hábitos alimentarios tan variables y caprichosos que preocupan a los padres. Da la impresión de que algunos niños siguen creciendo y desarrollándose a pesar de no comer prácticamente nada. En realidad, por lo general si un día comen poco, al día siguiente lo compensan comiendo más.
Los síndromes hereditarios de fiebre periódica son trastornos hereditarios que causan episodios periódicos de fiebre acompañada de otros síntomas y que no se deben a las infecciones infantiles habituales o cualquier otro trastorno evidente.
La diabetes mellitus es un trastorno en el que la glucemia (concentración de azúcar o glucosa en sangre) es excesivamente alta porque el organismo no segrega suficiente insulina o no puede responder con normalidad a la insulina producida.
La infección por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) es una infección vírica que destruye progresivamente ciertos glóbulos blancos y hace que las personas sean más vulnerables a otras infecciones y a algunos tipos de cáncer y provoca el síndrome de inmunodeficiencia adquirida (sida).
Las infecciones ocurren en todas las edades, pero son una gran causa de preocupación en los recién nacidos porque, sobre todo los recién nacidos prematuros, tienen un sistema inmunológico poco desarrollado y son más susceptibles a las infecciones. Aunque ciertos anticuerpos protectores pasan de la madre al feto a través de la placenta (el órgano que proporciona alimento al feto), las concentraciones de anticuerpos en la sangre del feto pueden no ser lo bastante elevadas como para combatir una infección.
La artritis idiopática juvenil engloba un grupo de enfermedades asociadas a la infancia que se presentan cerca de los 16 años de edad y provocan una inflamación persistente o recurrente de las articulaciones.
El término trastornos del desarrollo debe sustituirse por trastornos del neurodesarrollo, más preciso. Los trastornos del neurodesarrollo son trastornos con base neurológica que pueden afectar la adquisición, retención o aplicación de habilidades específicas o conjuntos de información. Consisten en alteraciones en la atención, la memoria, la percepción, el lenguaje, la resolución de problemas o la interacción social. Estos trastornos pueden ser leves y fácilmente abordables con intervenciones conductuales y educativas o más graves, de modo que los niños afectados requieran un apoyo educativo particular.
La apnea (falta de respiración) de la prematuridad es una pausa en la respiración que dura 20 segundos o más en un bebé que nace antes de las 37 semanas de gestación y que no ha recibido ningún diagnóstico de trastorno subyacente que cause apnea.
Varios trastornos importantes de la salud mental, como la depresión, los trastornos de ansiedad y los trastornos de la conducta alimentaria empiezan con frecuencia durante la infancia y la adolescencia. Otros trastornos, como el autismo, solo empiezan durante la infancia.
Muy pocos niños pasan sus primeros años sin presentar problemas menores. Son habituales el llanto, los sarpullidos, los problemas de la alimentación y la fiebre ocasional. Estos se vuelven preocupantes sólo cuando llegan a grados extremos (por ejemplo, cuando los niños lloran demasiado, cuando su crecimiento es insuficiente (véase Fallo de medro), o cuando tienen fiebre alta y persistente). La mayoría de los problemas en la infancia no son graves.
Las distrofias musculares son un grupo de trastornos musculares hereditarios en los que están alterados uno o más genes necesarios para la funcionalidad y la estructura muscular normales, provocando debilidad muscular de gravedad variable. Las fibras musculares aparecen deterioradas (distróficas) cuando se observan al microscopio. La distrofia facioescapulohumeral es la forma más frecuente de distrofia muscular. La distrofia muscular de Duchenne y la distrofia muscular de Becker son las segundas formas más frecuentes. La distrofia muscular de Duchenne es una forma más grave. La distrofia muscular de Becker está estrechamente relacionada con la distrofia de Duchenne, pero comienza más tarde posteriormente en la vida del niño y causa síntomas más leves.
La neurofibromatosis es un grupo de trastornos genéticos en el que se forman tumores blandos y carnosos de tejido nervioso (neurofibromas) bajo la piel y en otras partes del cuerpo, y en el que a menudo se desarrollan en la piel manchas no protuberantes de color café con leche (manchas café-au-lait).
La parálisis cerebral se refiere a un grupo de trastornos que incluyen dificultad de movimiento y rigidez muscular (espasticidad). Es el resultado de malformaciones cerebrales que ocurren antes del nacimiento conforme se estaba desarrollando el cerebro o debido a una lesión cerebral que se produce antes, durante o poco después del nacimiento.