El hierro (Fe) es un componente de la hemoglobina, la mioglobina y muchas enzimas del organismo. El hierro hemo se encuentra principalmente en productos de origen animal. Se absorbe mucho mejor que el hierro no hemo en plantas y granos. El hierro no hemo representa > 85% del hierro en la dieta promedio. La absorción del hierro no hemo aumenta cuando se consume con proteínas de origen animal y con vitamina C.
El hierro puede acumularse en el cuerpo debido a
Tratamiento con cantidades excesivas o durante mucho tiempo
Transfusiones de sangre a repetición
Hepatopatía alcohólica
Sobredosis de hierro
La sobrecarga de hierro puede resultar de una enfermedad hereditaria por sobrecarga de hierro (hemocromatosis), un trastorno genético potencialmente fatal pero de fácil tratamiento en el cual se absorbe mucho hierro. La hemocromatosis afecta a > 1 millón de personas en los Estados Unidos.
Una sobredosis de hierro es tóxica y causa vómitos, diarrea y daño intestinal y en otros órganos.
El diagnóstico de toxicidad del hierro se basa en la presentación clínica y se confirma con hierro sérico, saturación de transferrina y concentración de ferritina (> 600 mcg/L).
El tratamiento de la intoxicación por hierro suele realizarse con deferoxamina, que se une al hierro y se excreta en la orina. La hemocromatosis se trata con flebotomía.
