La arteriopatía periférica (enfermedad arterial periférica) produce una disminución del flujo sanguíneo en las arterias del tronco, de los brazos y de las piernas.
A menudo, se utiliza el término arteriopatía periférica para describir una circulación deficiente en las arterias de las piernas como consecuencia de la ateroesclerosis. Sin embargo, la arteriopatía periférica puede afectar a otras arterias, como las de los brazos, y tener otras causas. Los trastornos que afectan a las arterias que irrigan el cerebro se engloban en una categoría distinta denominada enfermedad cerebrovascular. Los trastornos que reducen el flujo sanguíneo de las arterias abdominales se consideran por separado y bajo la denominación de oclusión de una rama de la aorta abdominal.
Causas
La arteriopatía periférica puede describirse como:
La arteriopatía periférica oclusiva se debe a una constricción o un bloqueo físicos de las arterias. La causa más frecuente es la ateroesclerosis causada por la acumulación de placa en las paredes de las arterias. La placa está formada por colesterol, material graso y fibrina (una proteína de la coagulación). La displasia fibromuscular es un ejemplo de arteriopatía periférica oclusiva causada por anomalías en las células de la pared del vaso sanguíneo en lugar de ateroesclerosis.
En la arteriopatía periférica funcional, el flujo de sangre se reduce porque las arterias no funcionan correctamente. Por lo general, las arterias de los brazos y de las piernas se ensanchan (dilatan) y se estrechan (constriñen) en respuesta a cambios en el entorno, como por ejemplo un cambio de temperatura, cambios en el flujo sanguíneo o señales del cerebro. La arteriopatía periférica funcional suele aparecer cuando los mecanismos normales que dilatan y contraen estas arterias actúan en exceso. Las arterias afectadas se contraen con más fuerza y con mayor frecuencia. A veces, esto ocurre como una contracción repentina y anormal de los músculos (espasmo) dentro de las paredes de los vasos sanguíneos. El espasmo provoca una constricción temporal que reduce el flujo sanguíneo. Con menor frecuencia, la afección se debe a la relajación anómala de los músculos del interior de las paredes de los vasos sanguíneos, lo que conlleva un ensanchamiento (vasodilatación) de las arterias. Estos cambios en la constricción pueden ser causados por:
Un defecto hereditario en los vasos sanguíneos
Alteraciones de los nervios que controlan la dilatación y la constricción de las arterias (sistema nervioso simpático)
Lesiones
Medicamentos
La acrocianosis, la eritromelalgia y el síndrome de Raynaud son ejemplos de arteriopatías periféricas funcionales.
